Cursos relacionados

Transportista de residuos peligrosos

¿Quieres ser transportista de residuos peligrosos?

Transportista de residuos peligrosos
El transportista de residuos peligrosos, además de conducir vehículos de gran tonelaje, debe encargarse de recoger cualquier tipo de material para su posterior recuperación y cumplir con las normas de seguridad establecidas, entre otras tareas.
Con los residuos peligrosos no se juega, por eso a la hora de transportarlos se precisa de un profesional que sepa tratarlos y que pueda evitar una catástrofe tanto humana como medioambiental, ya que hablamos de productos nocivos para la salud y el hábitat. Por residuos peligrosos entendemos aquellos que contienen mercurio, arsénico, metales pesados y amianto, entre muchos otros.
Funciones


La labor del transportista de residuos peligrosos no sólo es conducir de un sitio a otro con gran cuidado, sino que en el momento en que los residuos son cargados en el camión, se convierte en su responsable y debe hacer cumplir, en todo momento, la normativa establecida.

Además de la inspección inicial del vehículo y la carga de los residuos, debe asegurarse de que la reglamentación es la correcta y conocer las particularidades de la materia que va a transportar y demás información relevante.
 


Empleo


Aunque, actualmente, la contratación de transportistas se ha reducido a causa de la crisis, porque hay menos exportaciones e importaciones, el transportista de residuos peligrosos no está sufriendo esta tendencia porque es una profesión muy especializada con un elevado grado de responsabilidad que cada vez está más solicitada a causa del aumento de empresas que reciclan.


 
ACCESO

Para ser transportista de residuos peligrosos se requiere:

  • Estar en posesión del permiso de conducir de clase B, con una antigüedad mínima de un año.
  • Realizar el curso de formación de conductor para el transporte de mercancías peligrosas en un centro de formación autorizado por la Dirección General de Tráfico.
  • Superar las pruebas de aptitud.
  • Reunir las aptitudes psicofísicas para obtener el permiso de clase C1 (como mínimo).
  • No estar privado por resolución judicial del permiso de conducir y tener residencia en España.