La estudiante de Periodismo

Nombre y apellidos: Beatriz Arias Martínez
Lugar de nacimiento: León
Edad: 23 años

Elegí la carrera de Periodismo porque sentía que no podía dedicarme a otra cosa que no fuera este oficio. Me apasionaba leer y escribir, escuchar las historias de la gente, de mis abuelos. Sentía mucha curiosidad por lo que sucedía a mi alrededor.

Elegí directamente ir a la universidad porque lo tenía bastante claro, pero tengo entendido que hay numerosos ciclos de grado superior de la FP especializados en el sector de la comunicación. Algunos compañeros que los han cursado están muy contentos con lo que aprendieron.

Al ser el último esfuerzo, todo comienza a darte un poco de vértigo, pero el último año me está pareciendo muy interesante. Todos estamos aprendiendo un poco más sobre materias básicas que todo periodista debería conocer: las relaciones internacionales, la política nacional,…

Cuando llegas a la universidad confías en el clásico método de copiar y memorizar. Pero la experiencia te enseña que, en carreras tan prácticas como esta, se tiene que compaginar la aptitud de entender y estudiar con la de reflexionar, relacionar y, sobre todo, trabajar en equipo.

Personalmente, me han gustado mucho las asignaturas de radio y televisión. Al tener la posibilidad de emitir los programas y los informativos en los estudios y en los platós con los que contamos en la facultad, tienes la oportunidad de hacer un trabajo muy parecido al real, como si trabajases en una emisora o en una televisión. Durante los tres primeros años las asignaturas son muy generales, de nociones básicas, sin profundizar demasiado allá. Son quizás, estas las que menos me han emocionado.

Este verano intentaré conseguir unas prácticas mediante la facultad. En algunos sitios, cuando necesitan contratar a alguien se fijan en los becarios. Si no hay suerte, empezaré a buscar trabajo y lucharé por mi oportunidad.

Esta carrera suele apasionar a todo el mundo que decide cursarla. Es una profesión muy vocacional, que puede ofrecer muchas satisfacciones y hacer sentir realizado a quien la elige.

Todo el mundo sabe que el periodismo no hace rico a nadie, no entiende de horarios, a veces tampoco de fines de semana y el ritmo de trabajo es, en ocasiones, estresante. Con todo, quien siente vocación por esta profesión, asegura que la balanza se inclina hacia lo positivo.

Mi consejo es que se esfuerce al máximo en todo lo que haga y si se trata de la profesión que le hace feliz, que disfrute trabajando. Creo que las personas que trabajan en lo que les gusta tienen mucha suerte.