¿Cómo preparar los exámenes?
Prepara bien los examenes
Desde un principio La mejor manera de llevar bien una asignatura a la hora de examinarse y no tener que pegarse la gran empollada en el último momento es empezando desde el inicio de curso. Para muchos este consejo es imposible de seguir, en primer lugar, porque además de estudiar también hay que realizar trabajos y claro, el día no da para tanto. Y en segundo, porque pocos empiezan a estudiar desde el primer momento. | + info |
Durante los días previos a los controles tu vida no debe cambiar, es importante que veas a tus amigos, hagas deporte, duermas tus 8 horas... Al haber ido estudiando desde el primer momento, ahora no tendrás que empollar y sólo deberás repasar la materia.
La planificación del estudio dependerá del número de exámenes que tengas, del volumen total de contenidos y del tiempo de que dispongas; contempla como mínimo un día por prueba.
La 1ª materia a estudiar se corresponderá con el último control que tengas y así sucesivamente. Así tendrás frescos los conocimientos de los primeros exámenes.
A la hora de estudiar, es importante que descanses cada hora y media de trabajo intenso.
Cuando ya hayas empezado las pruebas, es recomendable que el día anterior vuelvas a repasar los contenidos de una manera más relajada, con la finalidad de refrescar la memoria.
Si ves que estás nervioso, te aconsejamos que intentes relajarte haciendo una actividad totalmente diferente, como ir al cine, al teatro, al gimnasio, a jugar un partido de básquet, lo que quieras, siempre y cuando te ayude a airearte.
El día del examen ya ha llegado, sobre todo mucha calma. Has estudiado y te lo sabes, así que tranquilo.
A la hora de realizar la prueba, no todo es sabérselo, también hay que expresarlo correctamente, de forma estructurada y bien argumentada, con buena letra y sin faltas de ortografía...
1º. Debes leer detenidamente la pregunta para saber qué es lo que se te pide y, a partir de ahí, hacer un breve esquema con los puntos a tratar. Si no planificas la respuesta, puede ser que se te olvide poner algo o que te acuerdes en el último momento y te veas obligado a añadirlo en una esquina de la hoja de cualquier manera.
2º. Es recomendable que utilices de forma oportuna el vocabulario y los tecnicismos propios de cada materia.
3º. Repasa detenidamente los contenidos antes de la entrega, siempre teniendo en cuenta el punto de vista del profesor.